Aproximación al votante: El PP es un partido de extrema izquierda

Hemos ahondado anteriormente en este blog, la contradictio in terminis de la izquierda patriota en un extenso y pesado artículo. Ahora toca exponer las diversas caras que tiene actualmente la izquierda en nuestra sociedad. Y puesto que se trata de un tema mucho menos profundo, procuraré tratarlo con mayor brevedad y en un tono más colocial para que le sea ameno al lector, y colando jerga e ingenio burbujista de vez en cuando para echar unas risas.

Antes de nada, centrémonos en el título de este artículo. ¿El PP izquierdista? Probablemente el lector pensará que estoy de coña o le estoy vacilando, pero nada más lejos de la verdad.
Para justificar la anterior afirmación, tenemos que hablar primero de cómo durante los años de la guerra fría, el KGB maniobró para destruir los valores tradicionales occidentales[1]. Varias generaciones llevan siendo educadas en dicha ideología desde entonces, de forma que hoy en día, las ideas subversivas introducidas por la inteligencia soviética en el mundo capitalista, perviven en la gente a nivel subconsciente.
Hablando en plata: la sociedad actual piensa en rojo. Valora con una base axiomática propia del comunismo y profesa sus mismos dogmas de fe. Por ejemplo, el comunista considera que la identidad nacional no es importante, y no digamos ya la personal; lo que importa es el bien colectivo de las minorías oprimidas, aunque sea a costa de anularse a uno mismo. ¿Quién podría considerar la igualdad por lo bajo una virtud? Inequívocamente, alguien educado en una moral marxista. Así se explica que ciertos valores y comportamientos que en la primera mitad del siglo XX eran la normalidad imperante, hoy sean proscritos e inconcebibles. El comunismo, que siempre fue enemigo de las culturas nacionales (en especial la occidental, por ser la más exitosa), - en teoría porque las consideraba tretas de la burguesía para doblegar al pueblo; en realidad porque era lo que se interponía entre el Politburó y la propiedad ajena - se infiltró en ellas y las emponzoño desde dentro.

Recordemos que la izquierda no es un movimiento homogéneo y que sus distintas ramas llevan matándose entre ellas por el electorado desde el momento mismo de su aparición, porque cada una de ellas cree que su metodología para alcanzar la "utopía" marxista es la correcta, a diferencia de la de sus rivales, a los que por cuestiones de la ventana de Overton, a poco que permanezcan a la derecha en el diagrama de Nolan, ya son considerados nazifascistas, aunque si le concediesen unos pocos años más les darían alcance en materia giliprogre. Claro, que en ese tiempo la izquierda más recalcitrante también habría encontrado una gilipollez nueva que asumir como deshecho shurmano inalienable y seguiría considerándoles nazifascistas, aunque la nueva normalidad se haya movido inexorablemente un poco más a la izquierda (¿Existirá algún límite de delicuescencia que el izmierdismo no sea capaz de traspasar?). Esta es la única razón por la que no es raro ver que desde Hundidos Podemos se critique la gestión del P(artido)P(rogre), a pesar de que ambos tengan los mismos objetivos y hagan lo mismo.

La izquierda marxista no destaca precisamente por sus economistas, a la historia me remito, pero lo compensa con sus sociólogos y agentes de marketing. Son tan brillantes que han conseguido vender al gran público que un partido que hace políticas de extrema izquierda como el PP, es de derechas por no sé qué de que sus fundadores eran ministros durante el franquismo (como si no le hubieran pegado el tiro de gracia al Régimen del 18 de julio)[2]. Y no solo se la han colado a sus votantes, sino también a sus detractores. La gente que vota al PP puede considerarse a sí misma de derechas, pero no ser consciente de que está votando a un partido izquierdista.
Para denominar al PP he acuñado el término "izquierda pasiva" o "izquierda por omisión". Quiere decir que aunque no es ideológicamente de izquierdas (mucho menos de derechas), permite a la izquierda hacer y deshacer a su antojo, porque realmente no se oponen a su abyecta moral de esclavo, por tanto, en la praxis es un partido ultraizquierdista más. En conclusión: la única ideología del PP es trincar, y mientras puedan seguir trincando ya puede reventar España, que les da igual lo que suceda a su alrededor. Pero recordemos que todos sus casos de corrupción palidecen ante la limpieza étnica blanda a la que nos somete con su pasividad, junto con todo el arco parlamentario.

La siguiente es una recopilación de políticas llevadas a cabo por el PP (y ya de paso por Ciudadanos, su marca blanca), que hubiera firmado cualquier izmierdista:

1. Aquí el supuesto partido franquista, condenando el franquismo
2. El PP introduce la enseñanza hezlámica en los colegios 
3. El PP contempla introducir festivos islamistas
4. El PP cuenta con militantes yihadistas entre sus filas
5. Rajao dice que la invasión y subsecuente suplantación étnica es inevitable
6.  ¿Cristi-Nazi Fuentes? No, más bien Comunistina Cifuentes. Introduce asignaturas gayers en los colegios
7. Recordemos que en 2011, el PP se llevó un buen pellizco de votos de los detractores del aborto. No tardó en traicionarlos y ya lo considera un derecho inalienable.
8. El bobierno de Marihuano Rajao financiando oenejetas antiblancas 1,2
9. Aprobados 268.000.000 € para asistir a inmigrantes ilegales. Que es un poco menos de lo que gasta en 6 años en defender las fronteras
10.  El PP quiere repoblar la meseta con sus nuevos votantes
11. Más políticas pro-refujetas
12. Ministro de Exteriores dispuesto a reformar la Constitución para contentar a la purria separatista
13. El PP acepta el acercamiento de etarras presos 
14. El PP riega con 1.000 millones de Euros la mafia de género
15. Tras normalizar el asesinato de bebés, el siguiente paso es legalizar su venta
16. 220 millones para mantener gitanos inintegrables
17. El PP refuerza la ignominiosa ley integral de virulencia de Genaro
18. El PP desaconseja ir a manifestaciones por la unidad de España porque convoca Vox
19. Aprobada ley mordaza eLoGeTeBé. PP se abstiene de tumbarla 
20. El bobierno reconocerá el ramadan como fiesta española (y mucho española) 
21. Pacto de estado feminazi 
22. El racismo pepero
 

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[1]Como vio lo práctica que era para mantener doblegada a la población, la CIA también empezó a divulgar una moral comunista descafeinada desde think tanks y mierdos de comunistación progres.
[2]Los ministros franquistas que hicieron el seppuku al Régimen en realidad eran duramente criticados por el Búnker, el sector continuista.